Viajar es un placer. Sobre todo si el paseo es a algún
sitio con cultura y gastronomía
de altura. Lo malo es que hay que llegar hasta allá, con
todas las cosas que te pueden
pasar en el proceso. Pero no pasa nada: para eso están
los seguros. Y yo tengo uno muy
bueno con mi tarjeta Master Card Black. O eso me dijeron
en el banco Helm cuando me la
vendieron. Si se retrasa el equipaje, te cubren parte de
los gastos mientras aparece. Si se
La realidad es que es un fraude: las condiciones de
reclamación de AXA están diseñadas
para que nunca te paguen la indemnización. Veamos mi
caso: Avianca me pierde la maleta
(esa es otra historia de terror que merece un artículo
aparte). Si no reclamo en 24 horas,
no tengo derecho a nada. Les reto a que encuentren esta
condición en alguna parte de
la página web de Master Card, Helm o Axa. Ni que decir
que en las siguientes 24 a un
viaje intercontinental, después de esperar dos horas en
el aeropuerto a que aparezca
tu maleta, y teniendo que comprar aunque sea un pijama,
lo último que se te ocurre es
llamar al seguro de la Master Card, al Helm o al Banco de
la República. Sin embargo, todo
juicioso, lo intenté. Busqué en la página web del Helm:
“master card black Helm seguro
de viaje”. El primer resultado: página del Helm dándote
“las ventajas de tu tarjeta”. Pero
sin número si mail para reclamos. El segundo resultado:
otra página del Helm, contándote
lo mismo. Al final, después de varios intentos, consigo
un número 1-800…. Pero ¿cómo se
llama a ese número desde Madrid?
Ahí fue donde me paré y decidí realizar la gestión a mi
vuelta a Bogotá. Total, uno piensa
que Helm, Master card y Axa son compañías reputadas que
no le van a engañar a uno,
¿verdad? ¿Pero cuando han engañado a nadie los franceses?
Cuando tengo el privilegio de llamar a un call center,
suelo anotar los nombres de las
personas que me atienden, por si se cae la llamada no
tener que repetir mi infortunio
una y otra vez. Lo hago en el reverso de la reclamación o
el justificante para que no
se pierda. Por eso puedo decir que hablé con Jairo,
Yenis, Manuel, Yaneth, otro Jairo,
Doris, y, finalmente, Carmen. Pasé por el call center del
Helm, de Master Card y de Axxa,
el villano del asunto. La respuesta de Carme fue tajante:
“que pena con Ud, pero las
cláusulas de nuestro contrato con Helm obligan a llamar
en las primeras 24 horas desde
que ocurre el suceso”. Eso, claro, no lo dicen en la
página web ni de Mastercard ni de
Helm. “Atendemos muchas solicitudes desde fuera del país
y si Ud no ha podido contactar
debe de ser su problema”. Eso solo me ratifica que hay
gente mucho más inteligente
que yo, pero no arregla mi problema. Pido que me pasen a
un supervisor. Carmen me
contesta que “no puedo pasarle a uno en el día de hoy”.
Le insisto y le explico que esto
es un fraude: ponen unas condiciones, no las avisan y
para colmo no ponen los medios
adecuados para cumplirlas (¿por qué no hay un mail para
este tipo de reclamaciones?
¿No les ahorraría costes?). “Ya le llamarán mis
compañeros… si lo ven adecuado”. Sigo
esperando a que me llamen. Pobre Carmen, ella solo
atiende a los clientes, le terminé
gritando: “¡esto es un fraude! ¡Es un abuso! Y ya está
bien de los abusos de los bancos y
las aseguradoras!.
Sé que no llegaré a nada en mi reclamación, pero al menos
escribo estas líneas para que
otros viajeros sepan que: i) hay que reclamar inmediatamente
(24 horas), ii) hay que llevar
los teléfonos internacionales de los seguros anotados,
iii) no hay que creer nunca en los
bancos ni las aseguradoras.
PÁSALO
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